domingo, 14 de septiembre de 2014

Quejarse por amor al arte

Desde el 11 de septiembre hasta el 13 de octubre, se puede descargar totalmente gratis desde iCloud las canciones del disco Songs of Innocence de U2 como un regalo de Apple que acompaña el lanzamiento del iPhone 6 y el iWatch (o el Apple Watch, como prefieran llamarlo). Aunque tenemos un disco más en la librería de la noche a la mañana... de todas maneras, la gente se tiene que quejar.

La primera crítica fue que el regalito le ha costado a Apple la suma de 100 millones de dólares por 500 millones de copias digitales, es decir, 50 centavos de dólar por cada disco y $0.045 por canción. Aclaremos que ese dinero no está saliendo del bolsillo de ninguno de nosotros; yo, usuaria de iDevices, no he pagado ni los 4 centavos equivalentes a un track y tengo las canciones.

También leí que alguien se quejaba de que no son innovadores y que antes hubo artistas que pusieron su música a disposición sin obligar a nadie.  Veamos: en 2001, Wilco lanzó gratuitamente el streaming de Yankee Hotel Foxtrot; en 2007, Radiohead sacó el disco In Rainbows para ser descargado al precio que el usuario quisiera poner y un año más tarde, Nine Inch Nails lanzó su campaña de Ghost I-IV desde $5 a $300. ¡Pero el disco de U2 es gratis!

Yo no soy amante de la música de U2 y desde hace rato no me parece que saquen una canción que se le plante a New Years Day o a Pride pero eso no quiere decir que el grupo no me guste del todo, ni tengo una lista de 10 cosas que odio de U2 (aunque admito que la nota de Dan Ozzi me resultó graciosísima); tampoco quiere decir que me voy a quejar por que me regalen sus canciones, de hecho no me quejo de que cualquiera me regale canciones.

U2 no está forzando a nadie a descargar nada, simplemente le vendió su material a Apple y la compañía puso el disco en la nube de la gente. ¿Para qué quejarse? Si no te gusta el grupo y si no quieres descargar el Songs of Innocence, siempre tendrás la opción de borrarlo.

jueves, 4 de septiembre de 2014

Cerati

Algunos pensaban que escribiría algo alusivo a la muerte de Gustavo Cerati, pero no tengo nada que decir, excepto gracias por la música.