martes, 17 de abril de 2012

No se me vaya a ofender

Varias veces me ha pasado que al llegar a una entrevista con algún artista, el periodista toma a mal y se ofende cuando le pido que utilice material promocional para ilustrar la información.

Muchas personas no saben que cuando un artista presenta un disco, usualmente viene acompañado de un concepto visual que se presenta en las fotos, los videos y los atuendos.  Si se desea mantener la uniformidad, las fotografías promocionales son las que pueden lograrlo.

Hay casos y cosas; hace poco me pasó que una periodista colocó una noticia con fotos bajadas de internet que tienen más de 3 años; el cantante ya no tiene bigotes, el bajista no tiene cabello largo y el guitarrista fue remplazado. ¿Cuál hubiese sido la solución? ¡Utilizar las fotos que le había enviado!

Sabemos que muchos medios escritos trabajan con su equipo de fotógrafos y sabemos también que algunas veces los fotógrafos no están disponibles; en cualquiera de los casos,  la solicitud no es para que se ofendan, todo lo contrario, es para facilitarles (y facilitarnos) el trabajo.

Imagínense que por utilizar fotos bajadas de Internet en el diario o la revista salga un cantante de cuerpazo y cabello largo y en el concierto salga un gordito panzón y calvo. ¿No sería impresionante? Puede pasar, sobretodo cuando se trata de entrevistas telefónicas. ¿Y qué tal si el día que se hizo la entrevista el artista amaneció hinchado, o el calor de la ciudad hizo que sudara más de la cuenta, o que la iluminación de las instalaciones del medio no sea adecuada y se le vean más ojeras que lo usual? ¡Se vería fatal!

Mejor ahorrémonos el disgusto y trabajemos de la manera apropiada. Si se le dice que utilice el material promocional, hágalo, es por el bien del artista a quien usted amáblemente le está ofreciendo un espacio; por tan sencilla solicitud, no se me vaya a ofender.